in

La televisión sigue siendo bipartidista

La Sexta y La 1 vuelven a ser las cadenas más seguidas en la noche electoral, aunque con menor audiencia que en abril

En las noches electorales, gana siempre la televisión generalista. Aun en la era de la fragmentación de audiencias entre plataformas y redes sociales, la televisión tradicional es, de lejos, el medio preferido por los ciudadanos para informarse sobre unas elecciones (84,1% según el CIS de marzo frente al 39,5% que eligen medios digitales). De ahí que anteayer hubiese la posibilidad de comprobar si cambia o no y cómo el comportamiento de la audiencia en dos noches electorales cuando están separadas poco más de seis meses.

Una conclusión puede ser que el espectador tiende a replicar en parte el comportamiento del votante. Desde el punto de vista de la audiencia, como de los escaños, los más seguidos fueron los dos habituales de los últimos tiempos (La Sexta y La 1), pero con menor participación que en abril y con una novedad en el tercer puesto, al que esta vez se aupó Antena 3 en detrimento de Telecinco.

Ser la cadena con mayor audiencia durante un buen número de noches electorales (ya lleva 12 consecutivas) ha convertido este primer puesto de La Sexta en algo casi predecible, cuando en realidad tiene más de gesta televisiva. El especial que Antonio García Ferreras dirigió el domingo logró entre las 21.18 y las 23.53 un 18,7% de cuota, con unos 3.589.000 telespectadores. Y casi 10,5 millones de ciudadanos vieron al menos un minuto de Al Rojo Vivo: Objetivo La Moncloa.

El espacio llevaba calentando motores, entre las 19.25 y las 21.18, con un 15,5% y 2,6 millones de televidentes. La cadena fue también la que más tiempo mantuvo a la audiencia siguiendo el análisis de los resultados y de los posibles pactos que se abren. Hasta las 1.26, cuando acabó el programa, La Sexta mantuvo un llamativo 14,8% de cuota con 1,3 millones de telespectadores. A las 22.38, García Ferreras tuvo su minuto de oro, con 4.370.000 personas viendo su programa.

El segundo puesto también tiene el mismo nombre desde hace tiempo: La 1, referencia histórica para las retransmisiones en directo. A diferencia de La Sexta, sin embargo, y por la falta de unos presupuestos nuevos y de un liderazgo enfocado al futuro —algo en una cadena pública vinculado a la estabilidad política—, RTVE anda en un momento de transición. Por eso, los resultados del trabajo en La 1 de los periodistas Ana Pastor y Carlos Franganillo al frente del especial 10-N. Tú decides, tienen un valor añadido. Un 10,9% de cuota (dos millones de espectadores) en el tramo central de la noche (de 21.00 a 23.54) y un respetable 10% (1,7 millones de televidentes) en el previo, entre 20.00 y 21.00. Ya muy avanzado el recuento, entre las 23.54 y hasta las 0.34 mantuvo un 8,9%.

“La cadena buscó jugar con una serie de recursos para mantener su identidad e incluso rompió la dinámica con dos entrevistas poco habituales en estos formatos”, explica Ana María González Neira, especialista de la Universidad de A Coruña en el análisis de audiencias. El programa entrevistó a Paloma Santamaría, la ujier más veterana del Congreso, quien acaba de jubilarse, y a la filósofa Adela Cortina. Si se le suman los datos de 24 Horas, que emitió también el programa, alcanza un 12.8% de cuota con 2,14 millones de seguidores.

La tercera posición en audiencia es, como con los votos, la más novedosa. Hace casi siete meses, Telecinco, una cadena menos centrada en el aspecto informativo, arrebató ese puesto a Antena 3, cuyo esfuerzo por mejorar sus servicios informativos es claro. El especial electoral de Telecinco del 28-A tuvo una cuota de pantalla del 8,2%, lo que supone 1,6 millones de personas, sin contar con la audiencia que sumó Cuatro, que emitió la misma señal. El programa de Atresmedia obtuvo esa noche un 7,6% de audiencia (1,43 millones de ciudadanos).

El domingo, esas posiciones se invirtieron. Antena 3, que emitió un especial electoral de Espejo Público presentado por Susanna Griso, logró mejorar su posición y obtuvo un 9,8% de audiencia, con 1,74 millones de televidentes a las 22.28. El Especial Elecciones 10-N de Telecinco, presentado por Pedro Piqueras e Isabel Jiménez, se quedó con un 8,8% de cuota de pantalla y 1,4 millones de seguidores —la situación cambia si se suman a Telecinco los datos de Cuatro, que volvió a difundir el mismo programa, con los que la primera alcanzaría el 12,1% y 2,3 millones—.

Hay una regla no escrita para las noches electorales que vincula la audiencia televisiva a la participación en las urnas. En abril, esta última alcanzó un porcentaje inédito desde 2004: el 75,75% del electorado. El domingo, la participación se quedó en un 69,87% y la media registrada por las principales cadenas también bajó. La Sexta tocó el cielo el 28-A con un 20,7% —el especial más visto de toda la historia de la cadena— mientras que el domingo se quedó dos puntos por debajo, con el citado 18,7%. La 1 recuperó aquella noche un liderazgo que había perdido en los últimos años con un 11,5% de cuota y anteayer se quedó con ese 10,9%. Solo Antena 3, con su 9,8%, remontó sobre la ocasión anterior. “Hay una cierta desafección y se ha notado en la participación y en el desencanto”, considera Neira.

What do you think?

0 points
Upvote Downvote

Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Loading…

0

Comments

0 comments

El plano imposible del político segundón

‘The End of the F*** World’, brillante y maldita adolescencia ‘grunge’