Una fuerte explosión en una panadería sacude el centro de París y causa al menos 20 heridos

Una fuga de gas podría ser el motivo del suceso, según la Prefectura de la Policía de la capital francesa

Un explosión en una panadería dejó este sábado una veintena de heridos, cristales rotos y coches destrozados en el centro de París. La causa probable es una fuga de gas, según las autoridades. Más de 200 bomberos trabajan en las tareas de rescate. La explosión, que según los primeros indicios fue accidental, ocurrió el mismo día en que la policía y los bomberos estaban movilizados para una nueva manifestación de los chalecos amarillos, la revuelta social contra el presidente Emmanuel Macron.

Los hechos ocurrieron poco antes de las nueve de la mañana en la calle de Treviso, en el distrito 9 de la capital francesa, cerca de la zona comercial y turística de los Grandes Bulevares. Un fuerte olor a gas alertó a los vecinos, que llamaron a los bomberos, según explicó una testigo a la cadena BFM-TV. Una vez los bomberos llegaron se produjo la explosión y se declaró el incendio.

“Estallaron todas las ventanas, todas las puertas que estaban abiertas se salieron del quicio, para salir de mi habitación tuve que caminar por encima de la puerta, los niños sentían pánico”, dijo Claire Sallavuard, una vecina que vivía en el edificio de la panadería y fue evacuada, citada por Le Monde.

Hay más de veinte heridos, entre ellos cuatro bomberos, según un primer recuento. Dos de los heridos están en estado crítico y otros siete permanecen graves, en un balance aún no oficial pero que apuntan varios medios franceses. La panadería se encontraba en la planta baja de un edificio residencial. La explosión despertó a muchos vecinos que aprovechaban la mañana del sábado para dormir. Dos horas después, los bomberos seguían intentando apagar el incendio. El primer ministro, Édouard Philippe, el ministro del Interior, Christophe Castaner, y la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, se desplazaron al lugar de la explosión. “El balance humano es grave”, dijo Castaner. “La situación está controlada”, añadió.

Las imágenes captadas por los medios franceses revelan importantes daños materiales tanto en la calle como en la fachada y el interior del edificio que albergaba el local. La explosión hizo temblar la zona y causó una columna de humo visible desde muchos puntos de la ciudad. Al menos siete vehículos han quedado destruidos por la detonación, según la policía, que ha alertado de la posibilidad de que se produzcan nuevas explosiones, por lo que ha recomendado a los transeúntes que se alejen de la zona, y también han pedido que nadie se acerque al lugar de los hechos en coche, para dejar trabajar a los servicios de emergencia.